¿Que está detrás de las comunas?

Robin Rodríguez

Dirigente de Vanguardia Popular

Todos los líderes carismáticos como Adolfo Hitler, Benito Mussolini o Hugo Chávez, han sostenido el régimen por su capacidad de renovar la esperanza en la población; con la particularidad que en nuestro país el 83% de sus habitantes residen en los sectores populares. Durante la crisis política-económica del régimen entre el 2002 y 2003, aparecieron LAS MISIONES; las cuales generaron la percepción en un importante sector del país, de un gobierno dispuesto atender las necesidades en el área del empleo, la salud y la educación. Sobre todo cuando los sectores reaccionarios y de ultraderecha venían de otra derrota en su afán de salir de Chávez pero sin una propuesta que atienda los males que aquejan al pueblo desde la conocida Cuarta República y profundizados por esta falsa revolución.

Ahora Chávez y las cúpulas podridas que lo acompañan realizan otra perversa maniobra, al desarrollar “un presupuesto participativo”, donde le otorgan a los Consejos Comunales obras menores con presupuestos precarios, los cuales terminaran generando problemas en las comunidades, al no tener capacidad de culminar muchas de esas obras, con el agravante que algunos bandidos del PSUV y de otros factores políticos en las barriadas, terminaran contribuyendo al saqueo de los recursos de todos los ciudadanos. Pero lo cierto es que la percepción que logran generar entre la población de menos recursos, es la búsqueda de la solución de algunos de sus tantos problemas y la ilusión de tener el derecho de decidir sobre asuntos tan importante como “el presupuesto nacional”.

Pero nuevamente esa derecha reaccionaria y antipopular que cuenta con mucho espacio mediático, simplifica su análisis al señalar que eso es COMUNISMO. Cuando existen indicios suficientes para desenmascarar el carácter antipopular y neoliberal de este gobierno, donde la inseguridad, el desempleo, la inflación y el disfrazado y gradual paquete económicos puesto en marcha desde un tiempo, contrasta con la entrega de la soberanía económica de la nación a través de las empresas mixtas en el sector petrolero (donde las transnacionales incluyendo las norteamericanas gozan con el reforzamiento de nuestra dependencia), el incremento de la importación y el grosero endeudamiento con los entes financieros internacionales.

Estoy seguro de la derrota de Chávez en las próximas elecciones parlamentarias, pero no debemos olvidar que todavía cuanta con el 45% de la intención de voto, puesto que la gestión de gobierno y sus maniobras populistas no son el centro del ataque de sus adversarios mediáticos; que unido a la falta de sintonía con los cambios profundos que desea la población en terreno político, económico y social, pudiera darle mayor márgenes a la hora de las elecciones. De allí mi insistencia que los mejores aliados de Chávez son esos sectores reaccionarios y de ultraderecha.

Es necesario que emerjan nuevos liderazgos, con una estrategia coherente y de profundo contenido social. Esos sectores que destilan una gran intelectualidad pero sin vinculación real con los problemas de la gente y su deseo de cambio, deben ser desplazados del escenario publico por dirigentes verdaderamente comprometidos con el pueblo.